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¿Acaso en verdad se vive en la tierra?

No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.
Aunque sea jade, se rompe.
Aunque sea oro, se hiende,
y el plumaje de quetzal se quiebra.
No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.

Netzahualcóyotl de Texcoco


23 de enero de 2010

Es horizonte mi boca



El culmen de tu mirada
aprisiona mi agonía.

Estandarte unido al cuello
tu garganta es desprecio
es dolmen que soporto con evidencia.

No sufro quehaceres vanos
si los impregno de lluvia nítida
al pasar el paño sobre el fuego
al elucubrar todos los inciertos pésimos
que destierra tu medianía.

Es horizonte mi boca
de lirios hediondos
que nutren la tierra.

Dispongo los jirones en líneas
banales cuerdas de apoyo
donde discernir no es posible
la carne de la duda
pues siempre es incoloro
el paso del que adolecen todos los seres
que desnudos cabalgan las entelequias.

El catabático, feroz, se viste de gala
al disolver su rugido implacable dentro de las venas.










Música: Depart and eternity, The variation II
Eleni Karaindrou