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¿Acaso en verdad se vive en la tierra?

No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.
Aunque sea jade, se rompe.
Aunque sea oro, se hiende,
y el plumaje de quetzal se quiebra.
No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.

Netzahualcóyotl de Texcoco


20 de enero de 2010

Ha llovido una lágrima

"No basta con tomar el propio placer
y luego cabalgar libremente
por los dominios de la tierra y de la mente."


El arte del placer, Goliarda Sapienza


Es sabido que el amor, como todos los deseos tiene fecha de vencimiento, sin prórroga que retrase el momento de su huída, quedando las playas áridas y los prados verdes, como si nadie hubiera caminado por su superficie.

Distancio mi rostro, abandonándolo en la sombra que crean los árboles; cuántos amores cuelgan de sus ramas como si fueran marchitas flores que nunca llegarán a cuajar en frutos, aquellos frutos que antes saboreaban los labios; y era maná caído del cielo, puro néctar de dioses.

Me veo a mí misma corriendo por la playa, como si fuese el viento que surge mar adentro; y vuelo a ras de la arena, acariciando los minúsculos restos de las caracolas, con esa extraña libertad que siento cuando el salitre del océano se adhiere a mi piel; y sonrío por dentro, sonrío desde los ojos internos, desde el corazón que nunca deja de latir entre mis huesos.

La noche se ha ido oscureciendo hasta el infinito y mis manos quedan en penumbra, prendidas en el borde de un cuarto de luna negra, triste por no tener a su lado el brillo de una estrella.

¿Por qué no consigo echarte fuera?, ¿por qué palpito cada vez que te pienso y pienso que mañana, otro día cualquiera voy a volver a encontrarme dentro de tu alma?

Ha llovido una leve lágrima en cada melodía susurrada por el viento, que sigue preguntándome por qué te quiero, por qué no logro romper el hechizo que me lleva a sentir tu voz, tu piel tan cerca de la mía que creo poder tocarte si alargo los dedos un poco más allá de los sueños.

No tengo suficientes fuerzas para cerrar todas las ventanas y el dolor, lacerante y terrible, va escapándose de mí hacia un lugar que carece de tiempo, girando siempre alrededor de las horas muertas.