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¿Acaso en verdad se vive en la tierra?

No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.
Aunque sea jade, se rompe.
Aunque sea oro, se hiende,
y el plumaje de quetzal se quiebra.
No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.

Netzahualcóyotl de Texcoco


15 de enero de 2010

La alegría del agua


Último destierro para las sombras
que olvidadas de ser tuyas, son nuestras
eternidad que dibuja un presente
de memoria cautiva entre nosotros.

Tras los muros aparecen paredes
causas justas, internas; desde fuera
solo son ventanas, no hay diferencia
cuando las abres o cuando las cierras.

Y sin embargo la luz es distinta
todas las mañanas surgen los vientos
ocultando el ocaso
detrás de las olas horizontales.

Sublimo el color negro de las lápidas
y la piel transforma su vestidura
en pensamientos que nacen despacio
entre las orillas de nuestros murmullos.

Cuantas mareas se han desperdiciado
cuantos náufragos se ahogan en ellos
enterrando los besos, las caricias
cuantos fueron los océanos muertos.

Pero la memoria sigue su rumbo
tornasolada, virando con tino
hacia los espejos que se despiertan
sumidos en la alegría del agua.













Música: Bliss sleep will come
Café del mar