Me reconozco en la niebla de tus ojos
en el infierno que se hunde en tu mirada
ese fondo oscuro que sueña con olas
y difumina todas las esperanzas.
Me reconozco en todas tus pesadillas
esas intermitencias de color negro
que te obligan a separarte del agua
a morirte siempre que escribes palabras.
He esperado perderte en una caricia
olvidar tu muerte vistiendo la nada
pero los deseos no entienden de distancias
siempre los imagino dentro de mi alma.
