Lo he visto en el futuro
cuando era joven
y los caminos no morían
viviéndolos tres veces.
Y los veo alejarse de mi tierra
soy quien empuja las olas
de cada año, de cada noche
que al cielo asciende.
Será un error si duermo
no quiero soñar con frío
mientras la rueda gira
a cada lado del eje.
Ahora lo llamo amor, tormenta
luego será desgracia que adelgaza la vista
comisuras vacías, descarnadas
cuando asome la fiebre.
Padeceré de males desconocidos
de pensamientos secos
arracimados como hienas
en carne maloliente
y moriré sin fuerzas
ni para odiarte
ni para quererte.
Música: fragmento de A wise protector, Bso Luther
Richard Harvey