Te he dicho ven, y sigues viniendo,
para luego irte
Una caricia
un silencio
no importa cuanta luz tenga el alba
si se apaga con un aliento
Tan lejos, es tanto el frío
que los cielos se cuartean
o son los dedos, los míos, los tuyos
no los siento; ayúdame a verte
dentro de ti mismo
Mientras, hago solsticios
entre números
sin mirar nunca al frente.