cabecera
















¿Acaso en verdad se vive en la tierra?

No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.
Aunque sea jade, se rompe.
Aunque sea oro, se hiende,
y el plumaje de quetzal se quiebra.
No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.

Netzahualcóyotl de Texcoco


7 de abril de 2010

Tu mano sobre la mía

Hoy descubrí tu mano sobre la mía
sensación de eclipse amparado tras la luna.

El hilván de mis sueños desflorados
es la imperfección de tus piedras.

No cesa de maravillarme la sombra
que incide perpendicular a mi cuerpo
futuro de un presente que es pasado
permanente abrigo sobre mi piel.

Y un puño se alza en pos del cielo
lleno de aves noctámbulas
vacío de mí.