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¿Acaso en verdad se vive en la tierra?

No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.
Aunque sea jade, se rompe.
Aunque sea oro, se hiende,
y el plumaje de quetzal se quiebra.
No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.

Netzahualcóyotl de Texcoco


23 de junio de 2010

Espora







Todavía no he despertado
y ya echo a correr
volviendo a la casualidad eléctrica
del universo de la piel.

Radico en una espora frágil
seno de virginidad inquebrantable
interpretando un acto de amor muscular
o revés de sed insinuado
en la curvatura de un vaivén.

La simulación crea una tangencialidad;
roce exquisito amoldado al intervalo
de una caricia febril e interna
que flota en el azar.

Flexible, viajo junto al humo hacia el éter
hasta llegar al hueco del albor
donde la alquimia genera un vórtice
paralelo al goce del éxtasis.