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¿Acaso en verdad se vive en la tierra?

No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.
Aunque sea jade, se rompe.
Aunque sea oro, se hiende,
y el plumaje de quetzal se quiebra.
No para siempre en la tierra,
solamente un poco aquí.

Netzahualcóyotl de Texcoco


24 de agosto de 2010

Labîos australes


Sobre el acento tu sombra circunfleja.

Súbito dolor,
copo que se desproporciona
y estrecha las ausencias.

Del aire soy cuerpo
y no palabra,
ni acaricio la lluvia
que no se deja.

Por eso soy mujer
de hondos valles
y con arpas de agua
mis pies calzo.

Bajo tu pupila mi piel,
estos labîos australes
y la noche no termina en tormenta
ni huracana el viento
las costuras de la existencia.